El amor real no es como te lo cuentan en las películas
El amor real
no es como
te lo cuentan
cuentos,
libros
o películas.
El amor real
es sutil,
no es egoísta,
no es sumiso,
no es impositivo,
no es sacrificado,
no es sufrido.
El amor real
es equilibrado.
El amor real
se dialoga,
se comprende,
se comparte,
se construye,
día a día,
una y otra vez.
El amor real
es sutil,
no es egoísta,
no es sumiso,
no es impositivo,
no es sacrificado,
no es sufrido.
El amor real
no es como
te lo cuentan
cuentos,
libros
o películas.
Elena Mayorga